La calvicie común o alopecia androgénica afecta al 50% de los hombres y al 5-10% de las mujeres según datos de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV).
La pérdida de pelo por este motivo es un proceso crónico y progresivo consistente en el adelgazamiento o miniaturización de los folículos pilosos hasta su práctica o total desaparición dejando áreas despobladas o con poca densidad en el cuero cabelludo del paciente. Su causa no es completamente conocida pero se sabe que están implicados factores genéticos y también hormonales, concretamente es sabido que la dihidrotestosterona, un derivado de la testosterona (la hormona masculina), es la responsable directa de esta miniaturización folicular característica.
Aunque disponemos de múltiples tratamientos dermatológicos para prevenir y tratar la alopecia androgénica, en ocasiones la pérdida de densidad es tan acusada que tenemos que recurrir al trasplante capilar, técnica quirúrgica que nos permite extraer folículos pilosos de unas zonas e implatarlos en aquellas donde se han perdido o son necesarios (zona receptora).
Estos folículos trasladados se mantendrán durante toda la vida pues son extraidos de regiones (zona donante) donde el pelo es “inmune” al proceso de miniaturización comentado como son la región posterior y lateral del cuero cabelludo (el pelo de esta zona nunca se pierde por avanzada que esté la alopecia del paciente), barba o región pectoral. Estos foliculos, aunque sean implantados en otra localización, como puede ser la zona frontal o la coronilla, mantendrán sus características iniciales de inmunidad a la dihidrotestosterona y no se perderán.
Tenemos dos técnicas fundamentales de trasplante capilar: La técnica de la tira o FUSS (follicular unit strip surgery) y la ténica FUE (follicular unit extraction). La primera consiste en extraer una tira de aproximadamente de 1,5 x 15-20 cm de la nuca del paciente, cerrando esta zona después con una sutura específica que dejará una cicatriz lineal prácticamente imperceptible. Esta tira es “procesada” por los técnicos en trasplante capilar en las unidades foliculares independientes que serán implantadas en la parte receptora (microinjertos). La técnica FUE se basa en la extracción de forma individual de las unidades foliculares de la nuca del paciente, una a una. Estos microinjertos serán implatadas en la zona receptora de igual modo que en la técnica FUSS. Cada unidad extraida dejará una cicatriz imperceptible de menos de 1 mm en la zona donante que será tapada por el pelo restante. Ambas intervenciones suponen un proceso largo (5-7 horas) y laborioso pero son extremadamente seguras y con mínimas tasas de complicaciones. Si el procedimiento es realizado por profesionales con experiencia en el trasplante capilar el resultado es excelente, alcanzándose el máximo de éste al año de la intervención.
El Hospital Viamed Santa Ángela de la Cruz y su Unidad de Tricología y Trasplante capilar está integrada por dermatólogos y cirujanos expertos en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedad del folículo piloso y en el trasplante capilar. Las cirugías en éste centro son siempre realizadas en un quirófano hospitalario, con la garantía de calidad y seguridad para el paciente que ésto supone y sin la necesidad de viajar ni ingreso hospitalario, pudiendo el paciente descansar en su propio domicilio el mismo día de la intervención.